La investigación sobre el Santuario Íbero de Sabiote arroja sorprendentes hallazgos
Tras un profundo estudio realizado por investigadores de las universidades de Jaén y Granada, y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, se ha descubierto su utilidad religiosa como espacio de purificación.
Situado de forma estratégica entre la ciudad de Baecula, en Santo Tomé, y el santuario de la Cueva de la Lobera en Castellar, suponía una parada en el itinerario purificador de la sociedad íbera de la época.
Su descubrimiento tuvo lugar durante la ejecución de las obras de la nueva autovía A-32 a su paso por el “Haza del Rayo”, nombre con el que se conoce a esa zona. Desde ese momento, vecinos con fincas colindantes alertaron sobre posibles expolios de lo descubierto.
En concreto, se ha investigado sobre la existencia de un humedal estacional en la zona, en la que la presencia del agua le otorgaría ese potencial “purificador, transformador y sanador”.
Según los indicios descubiertos, la zona próxima a este humedal podría haber contado con la presencia de gramíneas y árboles mediterráneos como pinos, robles, acebuches y encinas.
Tras el estudio realizado sobre la zona, se ha podido concretar la existencia de este santuario entre la Edad de Bronce y la Edad Media. Así, en las excavaciones realizadas se han podido extraer numerosos objetos como “figuras femeninas y masculinas semiesquemáticas, en actitudes rituales diversas, relacionadas con prácticas de cohesión, fertilidad y protección” y también “partes anatómicas (piernas, manos y brazos, así como falos), relacionadas con cultos salutíferos y curativos”. Muchos de ellos se han incorporado a la exposición temporal “Exvotos íberos. Paisajes sagrados, peregrinaciones y ritos”, del Museo Ibero de Jaén y en la Antigua Escuela de Magisterio de la Universidad de Jaén.
Todo ello refuerza, según los investigadores, el carácter ritual del sitio como un lugar de purificación en el camino al santuario de la Cueva de la Lobera.