Indignación generalizada por el caos de la Junta en el reparto de mascarillas.
El PSOE denuncia el “desabastecimiento” en muchas farmacias, donde las Junta apenas ha repartido una cuarta parte de las mascarillas anunciadas, y exige a la Junta “menos derroche en propaganda y más dinero para este material de protección”. “Con el dinero que se gastan en autobombo, podrían comprarse 3 millones de mascarillas para la provincia”, apunta
La parlamentaria socialista Mercedes Gámez denuncia el “desastroso” reparto de mascarillas de la Junta de Andalucía, con un “desabastecimiento general” en las farmacias y la “indignación” de los colectivos a las que van dirigidas, fundamentalmente personas mayores y con discapacidad, que no han podido hacerse con su pack.
“Nos llegan denuncias de que la Junta apenas ha facilitado una cuarta parte del total de mascarillas anunciadas, lo que se ha traducido en farmacias sin existencias, en usuarios enfadados y en farmacéuticos teniendo que afrontar las quejas de estas personas ante la indolencia, incompetencia y dejadez de la Junta de Andalucía”, resume Gámez.
La parlamentaria socialista recuerda que “ya era ridícula la cifra de mascarillas que quería repartir la Junta”, puesto que sólo distribuye 3 mascarillas para 90 días y únicamente a personas mayores y discapacitadas. “Siendo pocas, la Junta ha sido incapaz de repartirlas en tiempo y forma. PP y Ciudadanos son un desastre sin paliativos”, sentencia.
Gámez denuncia que la Junta se va a gastar 21 millones de euros en propaganda y publirreportajes, una cantidad con la que la provincia de Jaén podría recibir cerca de 3 millones de mascarillas.
“Sin embargo, la Junta prefiere gastarse el dinero público en el autobombo y en maquillar una gestión deplorable con grandes titulares. 3 millones de mascarillas podrían llegar a la provincia de Jaén y la Junta prefiere gastárselo en propaganda”, critica.
La parlamentaria socialista pregunta a quién hay que pedir responsabilidades por esta nefasta gestión, si al presidente Moreno Bonilla o a la empresa Bidafarma, de la que su esposa es gerente de Relaciones Institucionales, la empresa a la que la Junta ha adjudicado un contrato de 7 millones de euros para las mascarillas que está repartiendo a los mayores de 65 años.
“No conocemos el contrato ni el procedimiento de adjudicación. Igual la Junta debería dar algún tipo de explicación si lo considera oportuno en aras de la transparencia”, ironiza.
Gámez recuerda que la Junta ha impuesto la obligación de llevar mascarilla como medida preventiva frente a la pandemia y, por tanto, “no puede escurrir el bulto y desentenderse de lo que esta medida supone para miles y miles de familias en términos económicos”. Así las cosas, ve “ridículo” que reparta únicamente 3 mascarillas para 3 meses, algo “verdaderamente aberrante”, y que encima lo haga sólo para personas mayores y discapacitados.
“Reiteramos la necesidad de que la Junta reparta mascarillas para el conjunto de la población y, por supuesto, con un mayor esfuerzo en el caso de los colectivos más vulnerables. Que no despilfarren tanto dinero en propaganda y lo destinen a mascarillas, que es un bien de salud pública para todos y todas”, apostilla.
