Dos años de cárcel por agredir con una motosierra al camarero que le reclamó pagar las bebidas

El Juzgado de lo Penal número 4 de Jaén ha condenado a dos años de prisión a Juan M. O. y al pago de una indemnización de 7.386 euros por un delito de lesiones al agredir con una motosierra al camarero de un pub de Úbeda (Jaén) después de que éste le reclamara el pago de las consumiciones que se había tomado en el local. Los hechos, según recoge la sentencia, tuvieron lugar sobre las 22.30 horas del 17 de mayo de 2011 cuando el acusado “pretendía abandonar el local sin abonar las consumiciones que había realizado”. Ya en el exterior del local, Juan M. O. se dirigió a su vehículo donde se hizo con la motosierra con la que cargó contra el camarero.
El camarero resultó lesionado con “heridas inciso contusas en manos, antebrazos y brazos como consecuencia de la agresión, el camarero resultó lesionado con “heridas inciso contusas en manos, antebrazos y brazos, lesiones que además de una primera asistencia facultativa requirieron tratamiento médico quirúrgico”.  La sentencia condena también al camarero Biteanu N. a tres meses de prisión y al pago de un indemnización de 2.840 euros. El camarero golpeó al acusado causándole, según recoge la sentencia en el apartado de hechos probados, “traumatismo craneoencefálico, hematoma preorbitario izquierdo, hematomas conjuntival y del pabellón auricolar” por las que precisó puntos de sutura y colocación de collarín cervical. Las declaraciones de los agentes de la Policía Nacional señalan que cuando llegaron al lugar de los hechos, tanto Juan M. O como el camarero presentaban “importantes lesiones y había abundancia de sangre”.
Juan M. O. se encontraba “tumbado en el suelo sin moverse” y Biteanu presentaba “profundos cortes en manos y brazos”. En el suelo, ya apagada, estaba la motosierra con la que Juan M. O. había atacado al camarero. No obstante, la sentencia condena a los dos por entender que tanto Juan M. O. como Biteanu N. son autores de un delito de lesiones. Eso sí, el magistrado Emilio García-Rueda impone una pena mayor a Juan M. O por considerar que con el uso de la motosierra “perseguía no sólo incrementar el riesgo de su acometimiento sino ocasionar un daño mayor que si no utilizara dicha arma, consiguiéndolo habida cuenta de las lesiones causadas”. Es por ello, por lo que, estimando “el mayor riesgo perseguido por el empuñamiento de la motosierra arrancada en la secuencia de los hechos y la naturaleza y gravedad de las lesiones producidas”, la pena impuesta es de 2 años para Juan M. O., frente a los tres meses de cárcel impuestos a Biteanu N.

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